El 29 de septiembre del año 2007 se estrenaba en España la segunda entrega de esta saga, con tan solo la falta de un día para que hiciera un año exacto del estreno de la primera entrega. Como la primera, esta cuenta con la dirección de Kenny Ortega («High School Musical«, «High School Musical 3» o «Hocus Pocus«) y vuelve a contar con los actores Zac Efron («Extremadamente cruel, malvado y perverso» o «El gran Showman«) o Ashley Tisdale («Scary Movie 5» o «Bichos«), entre otros.
Con nuevas canciones y una nueva trama debemos saber de que trata esta segunda parte para poder hablar de ella:
Es verano, los chicos encuentran trabajo en el resort de la familia Evans por un plan de Sharpey para separar a los Wildcast. Cuando Troy empieza a alejarse del grupo, todos empiezan a pesar que ha cambiado. ¿Elegirá Troy a su equipo o al inminente futuro, el cual se acerca a una velocidad demasiado rápida?
No me cansaré de decir que me fascina el hecho de que no recuerde cosas que me pasaron hace dos días pero que recuerde a la perfección cada canción y cada baile, pero literal que me sé hasta la canción del béisbol (y la odiaba demasiado cuando era pequeño).
Vayamos por orden, primero hablemos de lo bueno:
Aunque recuerdo con mucho recuerdo la primera película, tengo que decir que las canciones de la segunda parte se me hacen mucho más agradables y movidas. Que con esto no digo que sean mejores, pero si que a mí me llaman más las canciones movidas que unas canciones lentas y demasiado «ñoñas«.
El vestuario y la ambientación. ¿Os acordáis que os decía que la ropa en la primera entrega me parecía muy hortera? Bueno, pues parece que lo han arreglado (aunque sigue habiendo cada outfit…). Y la ambientación me encanta. No el lugar donde se graba, que también, si no que eligieron el azul para «representar» esta película. ¿Sabéis lo que os dije de que en «La Casa de Papel» siempre predomina el color rojo. Vale, en esta entrega predomina el azul claro, simulando el color del agua de una piscina (lo que le da mucho tinte de verano, aunque en esa misma época el año pasado estaban grabando en Navidad, pero bueno, queda muy bien).
Aunque el humor sigue siendo «demasiado» ambientado para un público más infantil, hay algunos momentos (sobre todo de Sharpay) que a mí me han dado la vida. Si es verdad que cuando estaba viendo algunas escenas yo pensaba: «Víctor, ¿qué te pasaba de pequeño? ¿Estas bien?«. Pero yo que sé. Es mi infancia y la recuerdo con mucho cariño, pero que cringe….
Ahora vayamos con las cosas que no me han terminado de gustar, o que no me entusiasman:
Por una parte, Gabriella. Es que es más tonta que un apio, tío. De verdad, que niña más absurda. No es que tenga nada en contra, además una de mis canciones favoritas de la saga entera, es suya. Pero es que en esta película me demuestra las pocas neuronas que tiene. En serio, cállate ya, por favor. Pesada. «¿»T» de Troy?». No, «T» de «tu eres tonta y no te has dado cuenta todavía».
No hay nadie más a favor de pasárselo bien que yo, pero vamos a ver: Tenéis 16 años, estáis en vuestro primer trabajo y os lo estáis tomando a cachondeo. Si estáis en horario de trabajo, estáis en horario de trabajo. ¿Qué es eso de irte a comer cuando te dé la gana (al día siguiente de que te acaben de contratar. Que tú me dices a mí que ha pasado un buen tiempo y ya tienes «cierta confianza» con los jefes, pues venga. Pero si tienes un horario, tienes un horario. Y ya que estas enchufada, al menos intenta hacerlo bien), o de decir: «Mire, yo es que a esta chica no quiero atenderla. ¿Podemos sortear quien la servirá?«. Vete al INEM si no te gusta, chico.
Y, el problema que entorna a las tres películas de la saga. Que todo gira en torno a un amor de niños de 15 o 16 años, donde algunas escenas son realmente empalagosas. Mucho. Demasiado. Pero en esta entrega (aunque de forma más infantil e «inocente»), digamos que en algunas cosas me ha recordado mucho a Carla y Polo en «Élite«. No daré más datos.
Venga, que ya casi estamos terminando, vayamos con unas cuentas curiosidades de esta segunda entrega:
- Miley Cyrus hace una aparición estelar al final de la película (creo que todos sabíamos esto, pero por si acaso).
- Sharpey hace referencia a la película de «Grease». Como ya os dije en la reseña de la primera entrega de esta saga, se supone que al principio iba a ser una secuela de «Grease».
- Sharpey hace otra alusión al cine, en este caso habla del capitán del «Titanic».
- En la escena en la que Sharpey, Ryan y sus padres golpean las bolas de golf desde un acantilado, Sharpey no golpeó su pelota, haciendose la loca (por lo que no se dieron cuenta y lo dejaron en el montaje final).
- Hay una canción que no se emitió en el estreno de High School Musical, pero si se encuentra en la versión de DVD y en la versión extendida. La canción se llama «humuhumunukunukuapua’a«.
- En una escena eliminada, vemos como Taylor va a buscar a Gabriella para convencerla a que vuelva.
- Al principio de la película, el reloj que miran los alumnos esperando al verano, cambia de tamaño cuatro veces.
- Troy vuelve a mirar a su muñeca para ver la hora, pero sigue sin tener reloj en ella.
- El día de su estreno, la secuela consiguió hacer reccord, con más de 17 millones de espectadores en América.
- En dos conversaciones hacen referencia a canciones de la saga: Una de ellas es»estamos juntos en esto» («We all in this together«) y en otra es «¿me permites este baile?» («Can we have this dance?«).
- Troy tiene de tono de llamada una canción de la primera entrega («get’cha head in the game«).
- A lo largo de la película, Kelsi y Ryan utilizan el mismo número de sombreros. En total 13 cada uno.
- El mismo piano que se usó para «Everyday» es el mismo que se usó en «Fabulous«, pero pintado de blanco.
- La canción de «Everyday» muestra muchas similitudes con la canción final de «Dirty Dancing«.
- Cuando Ryan recibe el premio, este sin querer rompe la estrella al abrazar a Sharpay. En la siguiente toma esta arreglada.
- El presupuesto de esta película era de 7 millones de dolares.
PERSONAJE FAVORITO: SHARPAY EVANS
Es que es diva y reina de América. Vive tanto en su mundo y le importan tan poco los demás que es que yo quería ser ella cuando era pequeño. Ella empezó el divineo y no se lo valoramos. Ella es la reina de la friend-zone y tampoco lo admitimos. Todos somos Sharpay.
Puntuación: (4 / 5)